LA HISTORIA NO CONTADA DE QUITO: Tercera Parte. La guerra civil de IÑAQUITO


 QUITO Y LA NUEVA CASTILLA


BATALLA DE IÑAQUITO O AÑAQUITO
18 de enero de 1546
Grabado de Antonio de Herrera.



Para muchos no es conocido este topónimo de NUEVA CASTILLA, que en realidad data de las Capitulaciones de Toledo -26 de Julio de 1529- suscritas entre Francisco Pizarro e Isabel de Portugal -regente del reino en ausencia del emperador Carlos V- previas al tercer viaje de Pizarro y es anterior a la fundación de la Ciudad de Quito -6 de Diciembre de 1534- y el establecimiento del Virreinato del Perú -20 de Noviembre de 1542.

Los acuerdos más importantes de las capitulaciones de Toledo fueron que la tierra descubierta se llamaría NUEVA CASTILLA, que Francisco Pizarro recibiría los títulos de gobernador, adelantado y alguacil mayor. Diego de Almagro sería declarado hidalgo, y se le encargaría la fortaleza de Tumbes y que Hernando de Luque sería obispo de Tumbes. Ente otras como que se obtendrían permisos para reclutar tropas, llevar caballos y otros pertrechos y, que la conquista se haría en nombre de la corona de Castilla y con la obligación de evangelizar a los indios.

La fundación de Quito se hace en dos etapas gracias a la presencia del adelantado Pedro de Alvarado que venia a la conquista de Quito desde Guatemala. Primero se funda Santiago de Quito en el Valle de Lilibamba. Luego ya con la presencia de Alvarado la ciudad de San Francisco de Quito es fundada ‘de iure’ por el mariscal don Diego de Almagro, el 28 de agosto de 1534 en la llanura de Riobamba y ‘de facto’ por el capitán Sebastián de Benalcázar o Belalcázar, sobre el antiguo poblado indígena , el 6 de Diciembre de 1534.

Como vemos Quito fue parte de la Nueva Castilla y hubo conflictos importantes previos a la guerra civil de Iñaquito. Aquí simplemente los vamos a ver ‘a vuelo de pájaro’ ya que no son objeto del ensayo pero si es importante tenerlos como antecedentes. Tampoco nos hemos detenido en la captura de Atahualpa por ser un hecho bastante conocido. En esta época es importante sin embargo anotar a dos personajes que participarán en el descubrimiento del Río Amazonas; Francisco de Orellana y Gonzalo Pizarro. Gonzalo, hermano de Francisco Pizarro va a ser el protagonista principal de la guerra civil de Iñaquito.

Las discordias entre los conquistadores empiezan con el reparto que hace el emperador Carlos V con la Gobernación de Nueva Castilla para Gonzalo Pizarro y Nueva Toledo para Diego de Almagro. Almagro descubre la pobreza del territorio austral y la dificultad de la conquista de lo que es ahora Chile por la presencia de los araucanos. Diego de Almagro provoca el inicio de las guerras civiles por considerar injusta la división territorial hecha por el emperador. Esto se salda con la batalla de las Salinas y la muerte de Almagro y posteriormente con el asesinato de Francisco Pizarro por los compañeros de Almagro.

Sucede al marqués Francisco Pizarro en el cargo de gobernador de Nueva Castilla un mestizo; El hijo de Diego de Almagro. Diego de Almagro el Mozo nacido en Panamá en 1522, su madre fue una indígena bautizada como Ana Martínez. Diego de Almagro el Mozo no duraría mucho en el cargo y fue vencido en la batalla de Chupas por el licenciado Vaca de Castro, el tercero y último gobernador de Nueva Castilla.




LAS LEYES NUEVAS, 

LA CREACIÓN DEL VIRREINATO DEL PERÚ 

Y LA REAL AUDIENCIA DE QUITO


Publicación de las Nuevas Leyes 1542



El Virreinato del Perú, se establece en Barcelona por cédula real el 20 de noviembre de 1542, erigido sobre lo que fue el Tahuantinsuyo sobrepasó su extensión y comprendió las Audiencias de Lima, Quito, Charcas, Panamá, Santa Fé, Chile y Buenos Aires. Posteriormente se crearán los virreinatos de Nueva Granada y el Río de la Plata, disminuyéndose su extensión territorial ya con las reformas borbónicas.

Hasta 1560, Quito depende del Perú, al principio como tenencia de Gobernación y luego como Gobernación. El trámite duro como tres años, al cabo de los mismos, el rey Felipe II expide la cédula de erección de la Real Audiencia de Quito el 29 de agosto de 1563. A Quito le correpondían las siguientes Gobernaciones: Quito, Esmeraldas, Guayaquil, Cuenca, Yahuarzongo, Bracamoros, Macas, Quijos y Popayán. A esto hay que añadir las misiones jesuitas de Provincia de Borja, Provincia de Mainas y Javaros, Provincia de Ucayali, Misiones de Mayorunas, Pebas y Ticunas, y Misiones de la Gran Omagua.


VIRREYNATO DEL PERU SIGLO XVI



Cabe aclarar que a partir de 1717 con la creación del Virreinato de Nueva Granada se suprime la Real Audiencia de Quito y es parte de este nuevo virreinato con la categoría de provincia. Esta situación se prolonga hasta 1723 cuando se restituye la Real Audiencia de Quito.

Al unísono de creación del Virreinato del Perú, en el año de 1542 el emperador Carlos V expide las ‘NUEVAS LEYES’ que serán la principal causa de la rebelión de los encomenderos y se saldará en Iñaquito con la muerte a manos de los rebeldes capitaneados por Gonzalo Pizarro del primer virrey del Perú, Blasco Nuñez de Vela.

Según las Nuevas Leyes, ninguna causa de guerra, rebelión o rescate, ni por causa de otro género podía hacerse esclavo a indio alguno. Pues los indios tenían la condición de vasallos de la Corona Real de Castilla y gozaban de plenos derechos.

Nadie podía servirse de los indios como criados o de cualquier otro modo contra su voluntad.

 Ningún Virrey, Audiencia o persona podía encomendar indios cuando moría un encomendero. A la muerte del encomendero, los indios pasaban a disposición de la Corona.

Las Audiencias debían reducir los repartimientos excesivos.

Todo encomendero que tenía indios sin título era desposeído inmediatamente de los mismos.

Los Virreyes, Gobernadores, Tenientes de Gobernador, Oficiales Reales, Prelados, monasterios religiosos, cofradías, hospitales, casas de moneda, tesorerías y otras instituciones semejantes no podían tener indios encomendados y los que los tuvieran debían ponerlos a disposición de la corona.



GUERRA EN IÑAQUITO o AÑAQUITO



Recibimiento de Gonzalo Pizarro a Francisco de Carbajal
Según grabado de Guamán Poma de Ayala


El antecedente de la guerra de Iñaquito son las “Nuevas Leyes” y la designación de Blasco Nuñez de Vela como Virrey del Perú. Nuñez de Vela, fue un recio castellano nacido en Ávila y además tuvo cargos cómo  corregidor de Málaga y veedor general de las guardias de Castilla. Un militar de acción que mucho antes de llegar a la ciudad de los reyes ‘Lima’, tanto en Panamá como en Tumbes aplicacó a rajatabla las normas dictadas por la corona. Entre otras liberó a indios y embargó caudales de encomenderos por juzgarlos que eran el fruto de trabajos forzados de los naturales.

El líder escogido por los encomenderos fue Gonzalo Pizarro, el último de los Pizarro residente en estos pagos de la antigua Nueva Castilla. Tenía una rica encomienda en la Audiencia de Charcas, la actual Bolivia donde disfrutaba de una acaudalada renta.

Pizarro fue en El Cuzco aclamado como Procurador General del Perú, luego se convirtió en Capitán General, levantó tropas y marchó sobre Lima. El procurador Gonzalo Pizarro contó con la ayuda de Francisco de Carvajal, apodado el demonio de Los Andes. A sus órdenes logró tener una fuerza de alrededor de 1200 hombres.

Entre tanto, el virrey Nuñez de Vela se hizo fuerte en Túmbez y organizó su ejército. Entre sus capitanes se cuenta con Diego Centeno que vino desde Charcas y Sebastián de Benalcázar quien trajo sus fuerzas desde Popayán para apoyarle. 

Fue entonces Gonzalo Pizarro con seis cientos españoles a hacerse fuerte en Quito y Carvajal se lanzó contra Centeno. En la llanura de Iñaquito vence Pizarro a Sebastián de Benalcázar y el virrey Nuñez de Vela el 16 de enero de 1546. Así se hizo Pizarro con los dominios del Perú, decapitando al virrey nombrado por Felipe II.

Para solucionar la derrota de sus hombres, el rey Felipe II comisiona a un cura hábil para la diplomacia: don Pedro de la Gasca. Con la gestión de Pedro de La Gasca se atenúan y modifican las “leyes nuevas” dictadas en Valladolid y además concede en nombre del rey, una amnistía general a favor de los encomenderos arrepentidos y finalmente organiza un ejército de dos mil encomenderos que al final vencen a Pizarro definitivamente en Jaquijagua, cerca del Cuzco el 9 de abril de 1548.





Bibliografía:

(i) Historia del Ecuador Salvat, Volumen III, Salvat Editores SA, Barcelona y Salvat Editores Ecuatoriana SA, Quito 1980.

(ii) GUSTAVO PONS MUZZO: 'Historia de la Cultura Peruana', Editorial Universo SA, Lima 1976.

(iii) Historia Quinto Curso, Colección LNS, Editorial Don Bosco del Ecuador, Cuenca 1978.



















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